Los Tigres dieron mucho de que hablar, luego del papelón que hicieron ante el Alianza, equipo que nunca había ganado a un equipo mexicano.

El Alianza se impuso 2 a 1, tras darle la vuelta al marcador y defender el arco con uñas y dientes en el duelo de ida de los octavos de final de la Liga de Campeones de la Concacaf.

Los salvadoreños demostraron con el corazón es más importante que los billetes en el campo, pues con una nomina humilde lograron imponerse ante unos tigres aburguesados y desinteresados en el futbol.

El partido de vuelta se jugará la próxima semana en el Estadio Universitario, donde se espera que los felinos salgan victoriosos de esta primer llave en el torneo que les daría su ansiosa llegada a un mundial de clubes.