Por Don Maqui
Tras casi 7 meses de confinamiento todos conocemos a quienes tomaron tan en serio esta pandemia que decidieron no arriesgarse, pero también no arriesgar a los demás.
Han sido días sombríos para principalmente los adultos mayores y los niños, unos y otros considerados un sector de la población más vulnerable.
Ellos debieron quedarse en casa y seguir haciéndolo, aunque el Bronco anunció que la reapertura económica está en vías de llegar al cien por cierto a Nuevo León.
Los abuelitos y abuelitas son también una especie de héroes silenciosos, ellos han tenido que sacar su mejor sonrisa en las videollamadas si el acceso a este espacio tecnológico es posible, porque no todos los de esta categoría pueden accesar a esos lujos de pandemia.
“Vivir para contarla”, se llamará esta historia que estuvo llena de terror diariamente a las 03:00 de la tarde, cuando nadie sabía si las cifras se manipulaban para hacer política o si realmente estaba sucediendo la desgracia que ahí se narraban día a día.
Pero conocemos a muchos de los abuelos que esas conferencias sólo las veían para escuchar un poco de esperanza, la cual jamás llegó, ni al día de hoy, ellos deberán de seguir esperando que el Bonco de la orden de salir a nuestros abuelitos.
Mientras tanto los niños también sufren enormidades por no poder salir a disfrutar un poco, ahí las incongruencias del gobierno salen a la luz pública, abren las plazas comerciales.
Sin duda han sido días difíciles para todos pero si usted tiene hijos pequeños o disfruta de la compañía de sus abuelos o padres que son adultos mayores no escatime en video llamarles, hágales placentera la espera, porque parece ser que está maldita enfermedad no tiene fecha de conclusión, parece que llegó para quedarse.
Desde aquí les brindamos un aplauso a esos héroes que prefieren seguir con vida para cuidar a sus nietos y han cumplido cabalmente.