POR: DON MAQUI

Aunque las comparaciones son odiosas en política, se deben de hacer para medir los impactos que genera la salida de un activo de las filas de algún partido político y, en este caso, nos toca analizar la de Mariela Saldívar, así como ponderar la llegada de otro personaje de altura al proyecto de Monterrey que encabeza el hijo de la leyenda Luis Donaldo Colosio Murrieta, para determinar con algo de claridad y, por supuesto, con subjetividad qué se gana y qué se pierde con ingreso y salida.

La ganancia que obtiene la campaña de Luis Donaldo es altísima, pues no todos los días se puede adquirir una figura de la calidad de Sandra Elizabeth Pámanes Ortiz. Basta con recordar su trayectoria política: fue presidenta del partido Acción Nacional en el estado, delegada Federal de relaciones exteriores en el sexenio de Vicente Fox, diputada local del propio PAN, consejera de diversos medios de comunicación, ex candidata a la alcaldía del municipio regio y consultora política en diferentes campañas, sin olvidar (por supuesto) el bagaje administrativo que le dio el ser la secretaria de ayuntamiento del municipio de Monterrey.

Aún y que la suerte no le ha sonreído del todo en los cargos públicos en los últimos años, Pámanes Ortiz goza de una preferencia importante en las encuestas de Monterrey, cualquier medición que coloque su nombre le otorga alrededor de cinco a ocho puntos porcentuales debido a su magnífico trabajo en todos los cargos que hemos nombrado.

La política es así, de números fríos y eso es lo que precisamente Sandra Pámanes le aportará a los naranjas en la capital regia. Su capital político ronda acorde al porcentaje de aceptación que tiene entre la ciudadanía por alrededor de 30,000 votos, y aunque Luis Donaldo aparece como puntero, no es nada despreciable la suma que le hará no sólo en sufragios Pámanes Ortiz, sino en una figura de renombre y calidad moral a toda prueba que además teje fino, como se dice en el argot político, con casi todos los partidos ya que, por lo menos, desde la presidencia panista y la Secretaría del Ayuntamiento, debió de ser una excelente conciliadora para lograr acuerdos que requerían sus cargos.

Por otro lado, se va de Movimiento Ciudadano la diputada Mariela Saldívar, que su cuantificación en votos simple y sencillamente no existe ya que jamás ha peleado un cargo público de elección, esto porque la primera ocasión que fue Diputada lo hizo al amparo de una suplencia que le regalo Concepción Landa y en su ejercicio actual fue Diputada de las llamadas de lista, es decir, fue un regalo su cargo.

Es imposible medir y cuantificar la portación que podría ser una persona que jamás ha participado en la elección, pero más aún, un personaje que pareciera se confronta siempre con quien es la oportunidad de trascender en la vida pública, no pasa por alto para nadie que ella misma confesó que cuando llegó a la función pública con el bronco fue gracias a una recomendación de Fernando Elizondo y dijo que estaba “sumamente agradecida por iniciar una etapa que ya desconocía ya que su función había sido en la iniciativa privada”.

Posterior a estar ahí se lanzó con todo contra el bronco cuando a este último le achacaban el tema de las “bronco firmas” y lo pretendían destituir. Lo de Mariela Saldívar, más allá de que tuviera o no razón la ciudadanía, la gente y los propios legisladores, parecía ingratitud ya que una y otra vez sostuvimos en este mismo medio que estaba imposibilitada de participar siquiera en la discusión del tema por haber pertenecido a aquel gobierno que denostaba y criticaba.

Hoy que se va de MC, parece que lo hace en el mismo tenor que como lo hizo del gobierno bronco, desprestigiando a la institución en donde estuvo y señalando que no existe armonía entre su dirigencia y quienes ahí participan.

Es imposible pensar que una personalidad como la de Mariela Saldívar pueda construir algo en un proyecto como el de Luis Donaldo Colosio que busca apertura para la ciudadanía y mostrar una cara distinta a la política tradicional, no puede estar una persona que se confronta con cuantos no piensan igual a ella, incluyendo por supuesto a los medios de comunicación que no les sean afines en un proyecto como el de los emecistas.

Por la razones anteriores de ambas mujeres políticas y muy valiosas en Nuevo León, se debe concluir que por lo menos en este momento la suma de Sandra Elizabeth Pámanes Ortiz para Luis Donaldo Colosio es mucho más que lo que le puede dejar la salida de Mariela Saldívar.

Como decía el gran Mario Castillejos (que en paz descanse) lo escrito, escrito esta.