La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) comenzó con los procesos en busca de sancionar alrededor de 420 establecimientos, en los que se encuentran supermercados, comercios minoristas, farmacias y funerarias por abusos en precios o servicios durante la pandemia del Covid-19.

De acuerdo con el departamento de comunicación del organismo, estas sanciones son las registradas hasta el mes de julio, la mayoría son por el incremento injustificado de los precios o por no respetar los precios exhibidos en stock.

Las posibles sanciones conllevarían la suspensión de la comercialización de los productos o servicios afectados.

Los productos que más se encarecieron, de acuerdo a las denuncias de los consumidores, son maíz, huevo, tortillas, azúcar, frijol, pan, leche, verduras, al igual que productos antisépticos como gel antibacterial, cubrebocas, alcohol, cloro, guantes de látex, jabón, toallitas húmedas, antigripales o vitaminas.

En el caso de las funerarias, la principal queja fue la falta de forma en los contratos que los proveedores deben realizar por ley, ya que no se establecieron las condiciones de los servicios que se prestan para dar confianza a los usuarios.