En una sede alterna decidida de último momento rodeada de un muro de vallas metálicas y un operativo de policías como protección, la bancada de Morena en el Senado, con apoyo del PT y del Verde, aprobó la extinción de 109 fideicomisos con una bolsa cerca de los 68 mil millones de pesos.

La votación en lo general, se llevó a cabo alrededor de la 1:30 de la madrugada de hoy, la cual fue de 65 votos a favor, 51 en contra y una abstención.

Tan vieja táctica del PRI que usaba en pasadas legislaturas, hoy es plagiada descaradamente por Morena, quienes han optado usar esta estrategia para sacar adelante sus reformas arbitrarias y garantizar su aprobación.

El responsable de cambiar la sede fue nada más y nada menos que Ricardo Monreal, coordinador de la banca de Morena, quien maniobró para llevar la sesión a la casona de Xicoténcatl, resguardada por un dispositivo de 350 elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.

Así, Morena lograba despreocuparse de las múltiples protestas que por días protagonizaron víctimas de feminicidios y violencia; de familiares de desaparecidos; de niños de Chilapa, Guerrero, que llegaron al Senado a manifestarse con rosas en las manos; de investigadores del CIDE y científicos del Cinvestav, así como de universidades extranjeras.

“Debo señalar, con toda seriedad, que la negociación ha sido muy tensa, muy difícil, que el grupo denominado de contención, ha expresado su oposición a que se apruebe de manera positiva este tipo de reformas en materia de extinción de fideicomisos”, dijo Monreal por la tarde con un mensaje en redes.