Arturo Zaldívar al rendir su último informe de gestión, tras cuatro años en la presidencia del máximo ente judicial,, se despidió con un contundente mensaje.

Aseguró en su discurso que para la gran mayoría de la ciudadanía la palabra justicia es una palabra completamente “vacía” sin significado alguno, y explicando que ya no creen en ella.

En su mensaje, recordó que antes de su llegada a la presidencia, el Poder Judicial estaba hecho un desastre, había corrupción por todos lados, además de problemas internos que dispararon la peor ola de justicia en la historia del país.

El mismo Zaldívar, elogió su gestión, para señalar, que fue transformadora, eliminó la corrupción y nepotismo, algo que ha llevado a una postura certera e imparcial a las decisiones del Poder Judicial.